En un tiempo tan lejano que solo había dos canales de televisión, solía pasar muchas tardes en casa de mis abuelos.
A mi abuelo le encantaba los musicales y fred Astaire era su actor favorito, recuerdo que cuando ponían alguna en la tele siempre en fin de semana era motivo de celebración.
En algún momento de la peli mi abuelo se levantaba y se ponía a bailar, no tenía ni idea pero lo hacía simplemente para verme reír.
Era algo super divertido.
Resulta curioso que dos generaciones después su bisnieto sea un gran seguidor de los musicales, nadie le a inculcado ese género cinematográfico pero a él le encanta, supongo que es el espíritu del baile, del musical que se lleva dentro y cuando te atrapa no se puede dejar escapar.
El caso es que cuando veo a fred y Ginger bailar no puedo evitar recordar lo feliz que era en aquél tiempo, esa clase de felicidad que solo se tiene cuando se tienen 8 años y pasas la tarde de Sábado con tu abuelo.
Resulta curioso que dos generaciones después su bisnieto sea un gran seguidor de los musicales, nadie le a inculcado ese género cinematográfico pero a él le encanta, supongo que es el espíritu del baile, del musical que se lleva dentro y cuando te atrapa no se puede dejar escapar.
El caso es que cuando veo a fred y Ginger bailar no puedo evitar recordar lo feliz que era en aquél tiempo, esa clase de felicidad que solo se tiene cuando se tienen 8 años y pasas la tarde de Sábado con tu abuelo.
Los dos canales, el blanco y negro, la carta de ajuste y el abuelo/a al lado... Bonita tarde de sábado, sin duda!
ResponderEliminarBesos,
Siempre he envidiado a los abuelos de los demas, yo no conocí a los mios y siempre los he hechado en falta.
ResponderEliminarMe encanta tu ternura, Doña M.
Saludos tiernos desde el aire
Algo se lleva en la sangre, recuerdo aquellas tardes de sábado, pelis en blanco y negro, Tarzán por la selva, los hermanos Marx haciendo de las suyas y Fred y Ginger bailando como sino estuvieran bien.
ResponderEliminarPuede que un poco de tu abuelo esté ahora en ese jovencito que también se emociona con el baile.
Un abrazo
* Carmen, parece que a ti también te trae buenos recuerdos aquella época en blanco y negro y por lo que intuyo "buenos recuerdos" me alegro si te hice recordar gratos momentos.
ResponderEliminarUn Beso ;)
* Rosa, Siento que no conocieras a tus abuelos, es un pilar de la vida que no olvidas yo los perdí en esa época tan rara de la adolescencia, que parece que nada importa, ahora me acuerdo y los echo cada ves mas de manos.
Me ha echo sonreír eso de mi ternura...
Un saludo ;)
* O SuSo, Que tal me alegra verte por aquí, pues si, a veces pienso que mi abuelo le ha dado un toque genético. Cuando lo vemos cantando "MAMA MIA" que se la sabe enterita con 5 años, todos no quedamos con una cara de alucinados, de flipados... es increíble.
ES verdad Tarzán, los hermanos Marx... Bruce lee y mucho cine mudo ¿Te acuerdas? oh.... que tiempos!!!
Veíamos lo que nos ponían y no nos quejábamos ahora le damos la vuelta a los 40 canales de TDT y no nos gusta nada.
Un besazo ;)
Entrañables Fred y Ginger... ¡bailando bajo la lluvia!... sin duda marcan toda una época del cine. Pero lo más lindo de todo es con cuanto amor recuerdas a tu abuelo. Lo comprendo, nada más gratificante que esos simples recuerdos de la infancia. Que lindo también que tu abuelo viva en tu hijo a través de los Musicales... ¡nada es casual!
ResponderEliminarAbrazos y gracias por tu presencia en mi blog.
He leído todo el relato con una sorisa, porque de una manera fresca y directa, muy próxima, cuentas algo de lo que yo guardo un recuerdo entrañable.
ResponderEliminarYo también viví tardes de fin de semana en blanco y negro, y compartí la emoción por Fred Astaire... en mi casa mi padre sacaba a bailar a mi madre, que siempre compartió con él, hasta el último verano, la pasión por el baile. Todavía, cuando paso por el hotel a cuyos jueves de baile acudían, los recuerdo dando vueltas en su propia magia, inscritos en su propia dimensión.
¡Qué tierno, tu abuelo, bailando para hacerte reír! ¿Cómo no iba a renacer en tu hijo?
*Eva, Hola que alegría verte por aquí!!
ResponderEliminarMe enternece que mis recuerdos no solo míos y estas pelis en Blanco y negro te traen igualmente esos recuerdos viejos pero que parecen estar muy presente.
AH! no es mi hijo sino mi sobrino.
Un beso y nos seguimos leyendo ;)
*Susana, Cuanto me alegra que mis recuerdo te hagan recordar a tus padres en esos momentos tan felices y llenos vida. Felicidades por tener( porque siempre están presente) esos padres tan divertidos y dicharacheros.
Un beso muy grande ;)
AH! como le dije a Eva, el pequeño bailarín es mi sobrino.
Nos seguimos leyendo...
Mi abuelo hacía lo mismo pero con las películas del Oeste, acabábamos siempre disparándonos como indios y vaqueros.
ResponderEliminarBonito recuerdo.
Un beso
* Dorothy, Que tal !!
ResponderEliminarLas pelis del oeste también dan mucho juego, eso de pintarte la cara y amarrar al abuelo en silla eh?
En fin buenos recuerdos que siempre quedan en el corazón.
Un beso grande ;)