
Ese recuerdo lo había recreado mil veces a los largo de su vida, lo había mantenido en secreto para sí como un tesoro guardado en un baúl olvidado.
Ese recuerdo le iluminaba cada ves que decidía revivirlo...
Debía de tener tan solo 4 años, la luz entraba con fuerza y el dormitorio de matrimonio estaba muy iluminado, la niña se paraba frente al ropero y miraba hacia arriba (el ropero era inmenso de color roble y el olor a madera se hacía latente), de pronto la puerta del ropero se abría y alguien bajaba algo de la balda superior, en ese momento la niña mira al espejo que hay colocado en la parte interior de la puerta de aquel ropero y ve reflejado en el mismo una mujer joven, sonriente, rubia, con un moño un poco despeinado y le entrega un juego de cocinitas que tenía guardado desde las navidades, ese reflejo de aquella joven no era otro que el reflejo de su mamá, ese era el primer recuerdo que tenía de su madre, una imagen en el espejo.
Han pasado ya 40 años y cuando mira a su madre a veces recuerda el rostro joven y risueño que se ha quedado para siempre en aquel espejo que aún está en casa.
"Mi madre.
Es risueña, soñadora, divertida, positiva, le gusta bailar, salir con sus amigas, contar historias de cuando era pequeña y vivía en una casa en el campo, hacemos mantas de lana juntas en los inviernos... pero es miedosa, le asustan las tormentas, los atascos en la carretera y ver bichejos.
Es genial, he tenido suerte, Mucha suerte en tenerla a ella como madre"
Aunque todos pensareis lo mismo de la vuestra, ¿A Que sí?
Este año he decidido que no le voy a regalar perfumes, ni joyas, ni nada parecido, este año voy a salir con ella a pasear, la invitaré a almozar o cenar ( lo que ella prefiera) iremos al cine, en definitiva pasar ratitos juntas y con los que se quieran apuntar claro, no hay nada mejor que pasar momentos junto a las personas que quieres.
Felicidades a todas las madres que pasen por aquí y me leáis.
Un Beso a tod@s.