Mírame.
Te veo.
Leo cada una de esas palabras que se quedan contigo.
No te fíes de mi aparente fragilidad.
Que no te conmuevan las lágrimas que caen solas.
Mi corazón late al compás del tuyo.
No abandonaré tu cuerpo en mitad del camino.
No tengas en cuenta mis arrebatos.
Ya sabes que a veces la conexión neuronal entre cerebro y boca
experimenta fallos
Y meto la pata a una velocidad imparable.
Encontraremos el mejor camino para volver a casa.
Tus palabras se cuelan en mí como bálsamo chamánico.
Me reajusto constantemente.
No soy ninguna niñita.
Soy una guerrera.
Lo sé.
Mírame.
Se que eres una luchadora, una guerrera, pero no me asustes.
ResponderEliminarUn beso.
Hola Nieves.
ResponderEliminarEntrada breve y poderosa. Es hasta motivadora.
Besos
Siempre lo he pensado de ti.
ResponderEliminarBesos, 🌷🌷🌷 buen fin de semana
Te miro.
ResponderEliminarSobrecoges...
Besos.
Bonita forma de pedir perdón. Saludos.
ResponderEliminarQue nos vean con toda la realidad y todo el amor, un abrazo Nieves!
ResponderEliminarMuy bueno.
ResponderEliminarHay gente que solo ve lo que quiere, nunca lo que es.
ResponderEliminarBella entrada,- Besos
ResponderEliminarQue puedo deciros... sois fantásticos y me dais la alegría para seguir inventando y compartiendo mis relato.
ResponderEliminarMuchas gracias por vuestras letras. Un abrazo infinito.
:D
Buenísimo!!!
ResponderEliminarBesos =)))
Gracias Lili, me alegro deverte por aqui y que te haya gustado.
EliminarUn abrazo grande amiga :)