No tengo miedo a perderme en tormentas,
en días grises ni en tristeza, ya no habrá viejos fantasmas asechando...
Eres el hombre mágico que llegó sin
escuchar tus pasos,
Sólo tú tienes la llave,
la que abre mi caja de pandora.
Tuya es únicamente la clave.
Esa mirada tuya, enigmática y tranquila me atrae como cometa a tu órbita.
Eres ese dulce tormento,
la ecuación a descifras.
Te lo digo así flojito,
como esos vientos mágicos que me regalas a cada momento, cada amanecer, cada noche de sueños de verano...
Estaré todo el tiempo de esta vida
contigo
te buscaré en mis otras vidas,
no existirá suficiente distancia,
no encontraré suficientes motivos para
dejar de quererte.
Eres el hombre mágico que llegaste como
el arcoíris tras la tormenta,
Llegaste de tu lejano Universo
toma asiento y quédate un tiempo,
tiempo sin reloj, un tiempo de soles, de
vida y de estaciones interminables.
Coge mi mano, abraza mi cuerpo menudo y enrédate
en mis ramas, méceme como si fueras viento del este,
que ese viento se lleve todas las
palabras,
que solo haya espacio para sentir, que
tus largas ramas me protejan y mis raíces te alimenten,
que ya no haya tu y yo,
que seamos unidad inseparable,
que nuestro tronco se enrosque como los
viejos olivos centenarios
Eres mi hombre mágico,
el que llegó a mi vida para
quedarse,
para avivar el fuego de la hoguera
de los dioses,
cantar bajo las estrellas y susurrar
bajo las sábanas.
el único que encontró la llave de lo que
queda de mí tras naufragios y batallas perdidas.
Ya no tengo miedo a perderme en
tormentas, ya no imploro ni rezo a dioses de luz y esperanza,
ahora estoy a salvo de todos los miedos,
de toda incertidumbre,
ahora siento tu magia,
y enredada quedo en tus ramas, en tu risa y en tus tormentas...
Ahora estoy en ese lugar en calma, escapando de las palabras,
intentando ser mas rápida que los ecos de la voz,
hoy no quiero huir del influjo de las miradas y los besos,
Ese es el origen,
ahí comienza, ahora coge mi mano, abraza
mi cuerpo menudo y enrédate en mis ramas, méceme como si fueras viento del
este,
has sonar mis cascabeles y quedémonos
aquí en este lugar en la fina línea de los sueños y la vida,
olvidemos las viejas heridas y las
palabras necias,
ahora formamos unidad, estás y
estoy
somos
Ahora que soy más que nunca, ahora que
siento y amo, me abro camino como nuevo manantial en nuevas tierras inexploradas,
ahora que estoy en casa, solo quiero ser explorada y conquistada, perderme y expandir toda mi esencia contigo... mi hombre mágico.
Romantica Nieves, que bello relato
ResponderEliminarBuen fin de semana
Besos
Ufa, que manera de atarse
ResponderEliminarQuè bien. Besos.
ResponderEliminarCuánta inspiración te trajo esta imagen Nieves! Aunque me quedo con la tuya propia, esta chica tiene falta de alimento! Ahora, toda la narración es un canto al amor sin dudas. Un abrazo!
ResponderEliminarEncantandor relato. Que ese hombre mágico siga siendo así muuuucho tiempo..Que viva el amor!!!!
ResponderEliminar"Mi hombre mágico".....¡Pero qué bonito! Toda una declaración de amor...
ResponderEliminar¡Que pases una feliz semana, Nieves! ¡Un beso!
Casi he podido vero,oírlo,ese sonar de cascabeles ..mmmm qué bien.
ResponderEliminarHay una casa al lado de una carretera, y dentro una chica que puede presagiar tormentas e inspirar el más dulce amor.
Puede ser la letra de un blues.
Me encanta.
Maravilloso!!!
ResponderEliminarMuchas gracias por vuestras visitas y comentarios tan amables siempre
ResponderEliminarUn besito a tod@s!