Ya no soy la misma de
antes. He sido víctima y también victimaria. He tenido que enfrentarme con el
dolor de perder a alguien y he renacido de las cenizas. He tocado el amor con
las palmas de mis manos, pero se me ha ido entre los dedos.Por eso, no quiero un novio.
No
deseo a un hombre al que le entregue mi alma y después se la lleve a
cucharaditas. No estoy interesada en amores de medio tiempo, ni con fecha
de vencimiento.
Quiero un compañero de camino. Un hombre que, además
de ser mi enamorado, también me acompañe en el sendero de vida que
he decidido tomar. Y que para él yo sea la única mujer con la que anhela
recorrer, día a día, todos sus caminos.
No deseo a un novio para
que me de besos, me acurruque en los días fríos o que me abrace en las
mañanas; eso lo hace cualquiera.
Quiero uno que mire en la misma
dirección que yo lo hago. Él con sus metas, yo con las mías, pero ambos
encaminados a una senda en particular: hacerlas realidad juntos.
Quiero a un hombre
independiente, sí; pero no, excluyente. Que entienda que una relación es
de dos y no de uno. Que este dispuesto a ceder, en algunas ocasiones, así como
yo lo hago.
Quiero a un hombre que me ame
tanto, como para imaginar una vida conmigo.
Quiero que anhele no solo
tomar mi mano en la calle, también en la vida. Que a su lado yo pueda vivir una
historia de amor infinito; no desechable.
No me interesa tener una
relación como las de hoy en día: efímeras, que en el primer intento dejan todo
en el camino, que prefieren tomar un nuevo rumbo antes de conservar lo que
tienen.
No quiero entregar mi corazón
por una porción limitada de tiempo, con el temor de que, en cualquier momento,
deje de latir y se resigne al dolor. No quiero que se lleven una parte de
mí y me dejen un agujero en el pecho.
Quiero a ese compañero de camino, a ese compañero de vida. Y no
deseo seguir caminando sin él.
Ese es el verdadero amor Nieves, el de la mirada conjunta uno al lado del otro, el del compañerismo, elegís muy bien, y deseo de todo corazón que llegue a tu vida, un abrazo!
ResponderEliminarOjalá lo encuentres, después de todo no pides tanto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Eso es pedir peras al olmo.
ResponderEliminarBesos
Espero que lo encuentres. Besos.
ResponderEliminarQué buena descripción Nieves! ese es efectivamente el "compañero de camino"....Y cuándo sabes lo que quieres, también sabes cuándo ha llegado a tu vida.
ResponderEliminarMil besos!!!
más claro el agua.
ResponderEliminarY como es agua fresca...a bebérsela toda!!!!
Tú no eres de medias tintas, es verdad.
Besos Nieves.