No
importa por donde me guie el destino, allá donde vaya tu fuerza me acompañará.
Serás bálsamo para mis miedos.
No
cabrán en mi alma lamentos, el espíritu de tu lucha será mi ejemplo hasta
alcanzar el final.
Serás el azote de los gélidos vientos, la esperanza del navío perdido en las Bermudas de un lejano lugar.
Luminoso
faro que alumbra en mis desatinos, mi antorcha será tu fuego, ese que jamás me
podrá quemar.
Nada
temas nunca...
Si alguna
vez te sientes solo, recuerda aquel faro con el que solías soñar.
Ese que alumbra tu camino, el que ilumina los días oscuros e inmensos como
el mar.
Solo cierra los ojos y pronuncia mi nombre... a tu lado siempre me vas a
encontrar.
Hermosa entrada, gracias por compartirla
ResponderEliminarBesos
Hola!
ResponderEliminarBonita entrada. Todos necesitamos un faro, una referencia.
Besos :)
Precioso escrito, Nieves.
ResponderEliminarMe gustaría poder visitar un faro, quien sabe...
Besos 🌸 buenas noches
Me gusto mucho
ResponderEliminarBesos
Todo un símbolo, el faro y el farero, trasladable frecuentemente a nuestra vida.
ResponderEliminarBesos.
Una declaración de solidario sentimiento amoroso, un abrazo Nieves!
ResponderEliminarMuy bonito, siempre hay un faro que nos ilumina...
ResponderEliminarsolo que a veces no lo vemos por nuestros ojos neblinosos.
Un gran abrazo, Nieves.
Qué linda entra.da!
ResponderEliminarMe encantado como todas.
Qué no falte el faro, que alumbre siempre.
Besos =)))
Hay gentes lejanas geográficamente, pero siempre muy próximas.
ResponderEliminarTiene mucha suerte!!!
ResponderEliminarBesos.
Hola, Nieves.
ResponderEliminarMuy bonito y musical este texto.
Ojalá todos tengamos un faro que divisar cuando nos encontramos en medio de la oscuridad.
Un saludo.
Gracias a todos por visitar este Muelle de hoy. :)
ResponderEliminarBesitos y felices días !!
Hermoso poema de cóncavo y convexo. Tu faro, el bálsamo. Que bien encajan. Un abrazo. Carlos
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