Corría el año 1999, Mi amiga Ani recién casada estrenaba casa, un precioso adosado con jardín, yo solía ir muy a menudo a acompañarla en las tardes mientras ella cosía, ya que por aquellos años daba cursos de corte y confesión.
Un día en una de mis visitas me sorprendió ver un nuevo inquilino, lo había puesto en una cesta acolchada y apenas pude ver un bultito de huesos con pelo negro.
¿ QUE ES? pregunté
Un Gato... Ayer, al despertar escuchaba maullidos de gatos, pero en un principio no le quise prestar atención Creí que era algún gato de los vecinos, pero al ver que no cesaban me asomé al jardín y lo vi...
Me lo han tirado por la valla Nieves. Me confirmó
¿Pero como puede ser eso?
Pues siendo!!! Este gato es un recién nacido, es demasiado pequeño para llegar aquí y fíjate, tiene la pata y la cola rota.
Entonces me acerqué al cesto y si! era cierto, era mas pequeño de lo intuí, además de estar en un estado anímico lamentable.
¿ Y que vas a hacer? Pregunté sabiendo la respuesta.
Ayer lo llevé al veterinario, le puse el chic y lo he vacunado, se llama Alejandro.... ¿No se morirá verdad?
Claro que no. Ahora está en su casa y aquí no se va a faltar de nada. Dije para dar todo el ánimo y esperanza posible.
El tiempo fue pasando y su recuperación fue tan rápida que apenas nos acordamos de que pocos días antes la muerte le acecho de muy cerca.
Me gustaba ir a casa de mi amiga -ahora somos familia, sus hijas son mis ahijadas-, me sentaba siempre en el mismo lugar, un butacón orejero, tan pronto como me sentaba Alejandro apetecía de algún rincón, escondite o refugio .. daba un ágil salto y se acomodaba entre mis piernas, le escuchaba ronronear a cada caricia, el gato se acostumbró a mi y yo al gato.
Alejandro era parte ya de nuestra familia, los que tenéis amigos animales me entenderéis Han pasado tantos años... las niñas,- mis ahijadas -, lo han conocido de siempre, estaba cuando llegaron a la vida y tenían una complicidad especial con él. Aunque por una extraña razón en estos últimos años sólo buscaba el calor del padre de familia, Alejandro ya era viejo, estaba magullado y cansado de la vida de gato, no quería fuertes caricias llenas de energía de pequeñas de 7 años, ni besos, ni carantoñas exaltadas, y el padre de familia sólo lo dejaba estar, le dejaba su hueco y ya está... a dormir.
Hoy Alejandro nos ha dejado, así de sorpresa, tal y como apararecio en nuestras vidas.. sin avisar... La muerte le alcanzó 10 años después, mucha vida para un gato que llegó moribundo y con un hilo de esperanzas, hoy descansa en un campo, bajo un árbol rodeado de aramagos y flores silvestres, justo al lado descansa mi Lasie, la perra que vivió con mis hermanos y conmigo toda nuestra infancia.
Sólo es un gato dirán algunos, un gato que siempre estaba en la calle, libre y sin rejas, pero cada noche volvía a casa, siempre aparecía al verte llegar y te acompañaba para despedirse cuando te marcabas. Hoy ha sido él quien se ha marchado y nosotros los que le hemos despedido....
- Hasta luego Alejandro... ♥♥♥
Que Alejandro nos espere muchos años.
ResponderEliminarBesos Nieves
Lo siento muchísimo. Sé lo que duele perder a un animal. Yo no quiero ni pensar qué pasará cuando me falte mi perro, Nixon, el año pasado a punto estuvo de irse y me pasé una semana llorando... Lo entiendo perfectamente, Nieves. Muchos ánimos.
ResponderEliminarUn besazo
Nieves, adoro a los gatos, son tan bellos, mimosos y libres y te miran con esos ojos enigmáticos...
ResponderEliminarTuve una gata blanca y gris, preciosa, y cuando murió, muy viejita, vivió 18 años, fue una pérdida importante.
Un beso enorme.
♥ GRACIAS Jaal, Dorothy, Mirella.
ResponderEliminarHoy estaban mas fuertes, haciéndose a la idea, poco a poco.
Tristes pero viviendo el día con apariencia de normalidad, así son estas cosas...
Un beso a los tres :I
Se lo que se siente cuando se pierde a un animal,forman parte de la familia....eso sólo lo comprendemos los que tenemos animales en casa.Lo siento Nieves!
ResponderEliminarUn beso!!!
Nieves, siento mucho su marcha y el dolor qué eso conlleva.
ResponderEliminarUn animal es capaz de dar más cariño, qué algunas personas.
Te estoy muy agradecida.
Besos, muy buena noche guapísima...
* Patry, y no todo el mundo lo comprende, incluso lo ve una frivolidad pero como dices quien tenemos amigos animales los queremos como personas.
ResponderEliminarUN beso :)
Vero, Gracias a ti por visitarme tan pronto, ya sabes que me alegro mucho:)
Un besito :)