* A mí nunca me gustó el porno... La conversación había derivado a una temática habitualmente censurable. Él permaneció calladito para dejar que se expresara sin posibilidad de que algún nuevo comentario hiciera saltar a otro tema menos interesante y por supuesto mucho mas aburrido.
*... En cambio si me gustan tus
revistas, esas que guardas en el último cajón, bajo las revistas de ciencias y
misterios.... Él encendió entonces un cigarrillo y lejos de verse
descubierto de su pequeño secreto la imaginó a ella sentada en el suelo,
junto a la cama mirando la revista mientras que a ráfagas, entre foto y
foto posiblemente pensaba en él y esa imagen le gustó, incluso
sintió una punzada de excitación.
*... Y no por
las fotos, solo salen mujeres pechugonas con extra de silicona, no he visto
otra cosa más artificial en mi vida. A mi me gusta leer sus
absurdas entrevistas, las preguntas que le hacen y sus respuestas picantes y
nada inteligentes, con ese lenguaje soez que a todos los tíos os pone
tanto. Dándoselas de no saber muy bien el suelo que pisan, ya me entiendes.
¿De verdad te molaría que te hablara así?
* No.... por lo que me cuentas no. Pero
es que yo no leo ese tipo de revistas. Sólo las veo. Yo prefiero leerte a ti.
Entonces ella lo imaginó leyendo sus cosas, lo imaginó poniendo esa mueca de
media sonrisa descubriéndose entre las líneas de sus textos. ¿Entonces no te excitas cuando lees mis
revistas a escondidas?
* Si te soy sincera, no. Lo que
pasa es que a veces cuando las leo pienso en ti, y me pregunto que es lo que te
gusta de esas mujeres que por regla general son tan de goma. Te
imagino mirándolas y me hace gracia.
* ¿Gracia? ¿Que me ponga cachondo con
otras tías te hace gracia? Ella no pudo evitar volver a imaginarlo y tapándose
la cara con las dos manos asintió con la cabeza
mientras esbozaba una sonrisa. Vaya si eres rara.
*
Es que me hace gracia
tu cara cuando piensas esas cosas, haces un movimiento con la comisura de los
labios, te muerdes la boca por dentro y me resulta gracioso.
Entonces él pensó que ella busca su mirada. Se queda silenciosa
mirándolo. Solo la delata cuando se toca los labios con los dedos, como si
nada, como si estuviera comprobando si estuvieran bien hidratados. Un
acto reflejo, que pasaría inadvertido pero que en ella era inequívocamente que
tenia algo en mente que no era el menú de la comida o la cena.
Entonces
hubo un silencio para nada incómodo. Los dos desglosaban toda la conversación.
* ¿Lo has hecho alguna vez con dos
chicas? Notó como él se mordió la boca por dentro.
* No... Ya me hubiera gustado. ¿Y tú,
lo has hecho con más de una persona a la vez?
* No.
* ¿Serias sincera si lo hubieras hecho?
* Puede que no... Sería parte de
alguna vieja historia, ¿Tú me serías sincero si lo hubieras hecho?
* Posiblemente también mentiría. Pero
siempre he sido clásico en estas cosas.
El
sonido de la lluvia torrencial golpeó los cristales de las ventanas en
ese instante.
Ambos
sonrieron porque se descubrieron los pequeños espacios que aún guardaban en
esas viejas y olvidadas habitaciones rojas, secretos secretísimos en
habitaciones de experiencias guardadas difíciles de contar.
Experiencias que siempre son más acertadas que queden para uno. Experiencias
de deseo, miedo y aprendizaje. Etapas, no más.
Aquella
conversación había superado con creces las expectativas de aquella tarde.
* ¿Quieres hacer el amor conmigo esta tarde?
La
tarde no estaba para callejeos y la conversación no derivaba a otra cosa, claro
que si, ella siempre quiere hacer el amor con él. Se quitaron la
ropa y se tumbaron en la cama. Él le pidió que no se quitara las bragas, le gustaba esa que llevaba hoy. Ella le pidió que no de quitara los calcetines, eran los que ella le regaló la semana pasada. Desnudos y con algún beso y caricia furtiva decidieron
seguir hablando. A él le gustaba escucharla y a ella como le hacía
una pregunta tras otra entrelazadas con mirada tranquila, dándose la mano,
algunos besos y carisias en los momentos de pausa.
Siempre
hay ocasión para hacer el amor pero no tantas para conseguír un buen tema de
conversación, de esos que donde mejor se mantienen es desnudos en una
cama grande.
Siempre queremos saber qué es lo que se esconde tras la parte que conocemos de nuestras parejas, y escarbar en esa parte siempre tiene su encanto y su intriga. Saludos.
ResponderEliminarCreo qué a partir de ahora esas revistas ya no tendrán para él ningún interés.
ResponderEliminarBonito relato, Nieves.
Besos 🌹 buen domingo
A mí lo que me ha imptesionado es lo de las revistas. Madre mía! Las que habré tenido y leido de jovencito. Y claro, las escondia. Y decían todas esas cosas tontas e increibles,... Pero mira por dónde, aunque internet mató al couchè del porno, se me ha encendido una picara sonrisa al recordarlas.... Gracias, China, por el recuerdo
ResponderEliminarSi la tarde no estaba para callejeos pues eso... a aprovechar el tiempo.
ResponderEliminarBesos
Los juegos del amor, un abrazo Nieves!
ResponderEliminarCualquier cosa que lleve a ese final, bienvenida sea.
ResponderEliminarCosas que disfrutan conversar algunas parejas
ResponderEliminarBuen Domingo
Besos
A mi no me gusta el porno y nunca tuve esas revistas, la que compraba se llamaba LUX y era un folleto seudocientífico.
ResponderEliminarbesos
Uys, pues yo veo un poco de tristeza en el relato. Eso de que cueste encontrar una buena conversación... Pero na, espero que sean imaginaciones mías jaja Buen final en todo caso para el relato, nada mejor que se pueda hacer un día lluvioso ^_^
ResponderEliminarNo siempre hay que hablar de temas trascendentales, surgió el tema de las revistas, bueno, bien venido sea cuando el final es estupendo....
ResponderEliminarMil besos!!!
jaja me hiciste recordar unas revistas que encontramos una prima y yo en unas vacaciones de verano....uyyyyy! jajaja
ResponderEliminarMe ha gustado la historia, como todas las que escribes.
Besos =)))
AY !! Muchas gracias por vuestros comentarios y por vuestra visita.
ResponderEliminarCuando os leo descubro que me encanta ver como lo que os escribo pueden despertar tantos recuerdos y pensamientos lejanos, que a todos en el fondoo nos gusta lo mismo...
Besitos y sed buenos :)